____________________________________________________Visita mi CANAL DE YOUTUBE_______________________________________________________

VANCE, EL CAZADOR (CAP. 14)


14 – PARPADEOS

                   Un parpadeo.
Apenas en un parpadeo Rossi libera su campo de fuerza.
                   En apenas un parpadeo, Ventura abre fuego contra su presa.
                   En ese pequeño parpadeo, Vance se echa a un lado, crea una pequeña cuchilla y la arroja contra el foco que ilumina la estancia.
                   Y en apenas otro parpadeo, el fogonazo del disparo precede a la oscuridad de las sombras.
                   Y en las sombras, Vance es otra sombra más. Una sombra letal.
- Te lo dije antes, Rossi – su voz resuena por todas partes en el interior de la habitación, que solo recibe como luz la que se filtra desde la calle a través del enorme ventanal – Y te lo digo ahora. Si quieres, puedes irte. Pero Ventura es mío.
- Lo siento, tío – responde Rossi mientras carga uno de sus puños con energía electroestática – El señor Ventura es mi jefe, y paga bien. Me quedo.
                   Esas dos últimas palabras son las últimas que Rossi pronuncia con vida, porque, nada más terminar esa afirmación, una cuchilla surge de las sombras y se clava en su frente, en el entrecejo. Cual muñeco roto, el cuerpo sin vida de Rossi cae al suelo con un ruido sordo.
- Yo también lo siento – añade con cierto pesar Vance.
- ¡Da la cara, hijo de puta! – Ruge furioso Ventura - ¡Sal donde te pueda ver! – Lleno de rabia, abre fuego contra las sombras. Justo en ese momento, otra cuchilla surge de las sombras y se clava en la mano que sostiene el arma, haciéndosela soltar con un grito de dolor.
                   Sirviéndose de las sombras, Vance se pasea de lado a lado de la habitación en cuestión de parpadeos. En cada uno de esos trayectos, emerge cerca del aterrado y colérico Ventura y le propina un tajazo en alguna parte desprotegida de su cuerpo; ahora en un brazo, luego en una pierna, después en una mejilla. Con cada nuevo tajazo, la herida resultante es más profunda y dolorosa que la anterior. En cuestión de segundos, el cuerpo de Ventura presenta cortes y sangre por todas partes y se mantiene en pie a duras penas.
- Mi mundo es oscuro y febril – Vance comienza a recitar su salmo a modo de cántico vengativo.
- Mi mundo es la noche, llena de sombras y oscuridad – a cada nueva estrofa le sigue un nuevo tajazo de cuchilla.
- Mi mundo es la caza – Y a cada nuevo corte le sigue un dolor profundo y lacerante.
- Me llamo Vance… - Con una mirada llena de odio incontrolado, Vance emerge de repente de entre las sombras y se planta ante el aterrado y balbuceante Ventura - ¡Y tú mataste a mi madre!
                   Con toda la fuerza que el odio y la rabia le dan a su mano, Vance le clava la cuchilla de plata en plena cabeza. Luego, como remate, le propina una patada en el pecho que lo arroja a través del ventanal, haciendo añicos varios de los cristales. Con su rabia aplacada, Vance se asoma al hueco abierto en el ventanal para ver en el suelo el cuerpo ensangrentado y sin vida de su enemigo. Extrañamente, lo primero que le viene a la mente es su hermana.
- June. Perdóname.
                   Afuera comienza a llover y Vance abandona el lugar con paso cansado. Tiene que hablar con su hermana, piensa. Sí, hablar y explicárselo todo. Pero eso será otro día. Hay tiempo para ello. Mucho tiempo.
CONTINÚA

4 comentarios:

  1. OMG! Este capítulo estuvo genialísimo ='D! me encanta el carácter de Vance!...
    Te felicito, Abuelo. :D

    ResponderEliminar
  2. Gracias, me alegra saber que te gusta. Mañana, el final de la historia.

    ResponderEliminar
  3. D: *respira profundo*
    El final. Ok, trataré de no llorar :O!
    Espero que escribas más historias como esas.

    ResponderEliminar
  4. Ya se sabe que, todo lo que empieza, debe terminar algun dia... XD.

    ResponderEliminar