El viento me llama. Por El Abuelo.
El viento
me llama.
Convertido
en suave brisa, se cuela por la chimenea y me llama,
pero no
estoy en la chimenea.
Se pasea
a través de las habitaciones de la casa y me llama,
pero no
estoy en las habitaciones.
Sale de
la casa, barriendo suavemente el suelo y me llama,
pero no
estoy en el suelo.
Se agita
entre los árboles, removiendo sus ramas y hojas… y me llama,
pero no
estoy en los árboles.
Se eleva
hacia el cielo y rompe las nubes en jirones, llamándome,
pero no
estoy entre las nubes.
Furioso,
como un niño enrabietado, se lanza contra el mar,
rompiendo
sus olas, arrancándole espuma a sus aguas,
y me
llama,
pero
tampoco me encuentra en el mar.
Emerge de
las aguas rabioso y ruge en el cielo, aullando mi nombre,
pero no
me encuentra en el cielo.
Se arroja
sobre el fuego del volcán, avivando sus rescoldos… y sigue llamándome,
pero no
me encuentra en el volcán…
El viento
me llama. Ah… tonto de él,
no sabe
que hace ya tiempo que partí…
y me hice
viento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario